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Ecoturismo y Aventura en el Valle de La Luna

La naturaleza en estado puro, reta a los turistas a recorrer extensos parajes en busca de las mejores experiencias y vistas desde las alturas, que puedan ser descubiertas por entusiastas en Chiriquí. Su biodiversidad es conocida a nivel mundial, incluso, ha sido elegido como un destino de retiro por excelencia.
Chiriquí es también conocida como “Valle de La Luna”, por su significado para los indígenas Ngäbe- Buglé. Esta provincia bañada por el Océano Pacífico, es tierra fronteriza con Costa Rica, por lo que el clima es fresco en sectores como Volcán, Cerro Punta y Boquete, con temperaturas bajas que van de 15º C hasta llegar incluso a menos 0º C en la cima del volcán.

Entre sus mayores riquezas está la agricultura y el ecoturismo, en especial en Tierras Altas, donde hay una gran variedad de ofertas de actividades al aire libre como el senderismo, el “zip line”, o con ciertos niveles de dificultades para practicar “trekking”, deportes extremos como el “rappeling” y el “river rafting”, que garantizan 100% adrenalina.
Su slogan como marca turística es “Discover Chiriquí”, porque hay mucho por conocer. No ha de extrañarse, que los chiricanos practiquen turismo interno cada fin de semana o días libres y feriados

Chiriquí Sinónimo de Aventura
Una de las mejores opciones de turismo para toda la familia, es participar de un senderismo. Primero debe contactar un guía certificado que conozca el recorrido y se reporte con las oficinas de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM,) por tema de seguridad. Entre los senderismos más populares están:
Sendero Volcán Barú: el más demandante si se quiere llegar a la cima del Volcán Barú (3,475 metros) el punto más alto del país. Hay diferentes recorridos que van desde subir a la cumbre en cómodos autos 4 x 4, hacer “trekking” y acampar en diferentes puntos. Puede tomar la entrada Oeste (volcán) o Este (Boquete).


Sendero Los Quetzales: une Boquete y Cerro Punta a través del Parque Internacional La Amistad. Su nombre se debe a las más de 300 parejas de quetzales dentro del Parque Nacional Barú.
Sendero Culebra: su tramo inicial para disfrutar la biodiversidad es de tres millas, pero si desea practicar “hiking”, su trayecto serpentea y se extiende por 18 km. Su recorrido total puede durar hasta siete días.
Sendero de los Puentes: en la cordillera de Talamanca que limita con el Parque Internacional La Amistad, hay un recorrido de 4.5 kilómetros, donde se puede visitar seis puentes colgantes en las copas de los árboles.
Uno de los deportes más populares en Boquete es el “rappelling” y la roca más frecuentada para escalar es el Gunko, cuyas formas basálticas con ladrillos volcánicos lo convierte en un reto para principiantes y expertos. Otro destino para practicar el rappel es en la cascada Jä Wäkta, donde también se puede dar una zambullida en sus piscinas naturales.
Deslizarse sobre las copas de los árboles y ríos: es posible si incluye un “Zip Line” tour. Hay un cable de acero de 3.5 kms dividido en 12 segmentos con diferentes alturas y que unen 13 plataformas, para que niños como adultos puedan emprender una aventura por las alturas.


Aventura de River Rafting: se puede encontrar paquetes de recorridos en el río Chiriquí Viejo, el Gariché, el Estí, el Majagua y Río Grande. Son diferentes rutas donde hay secciones con olas pequeñas Clase I, rápidos con olas hasta de tres pies de altura Clase II, rápidos largos con ondas irregulares y difíciles.
Todos los años, la Cámara de Turismo de Boquete organiza el Barú Eco Fest, donde nacionales como extranjeros se suman a la aventura para escalar el punto más alto del país. Una experiencia que muchos se preparan para vivir y recordar por siempre.

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