A principios del año 2000 se estaban desarrollando proyectos de gran impacto en los bosques circundantes a la cuenca del canal y la necesidad de conservar y educar sobre su importancia era vital. Esto originó la creación de un centro interpretativo del bosque tropical panameño, ubicado en medio del mundialmente reconocido Camino del Oleoducto, un sitio con una gran diversidad aves.

Protección de las Aves
Este centro es administrado por la Fundación Avifauna Eugene Eisenmann, cuya misión es la protección de las aves de Panamá y sus hábitats. Por esta razón, un grupo de apasionados por la conversación ambiental, nacionales y extranjeros, conceptualizó la creación de este centro interpretativo que permitiera llegar a la gente mediante la educación ambiental y el turismo sostenible.

Conecta con la Naturaleza por Todo lo Alto
El Parque Natural Soberanía es donde se encuentra el Panama Rainforest Center a sólo 45 minutos de la ciudad. En el 2008 abrió sus puertas y desde entonces ofrece un espacio para conectar a los Visitantes nacionales y extranjeros con las maravillas del bosque por medio de sus senderos muy bien señalados.
Cuenta con un centro de visitantes donde se pueden observar los colibríes comiendo constantemente en sus bebederos y una impresionante torre de observación de 32 metros de altura con vista al Lago Calamito desde su plataforma más elevada.

Observación de Aves y Mucho Más
La actividad principal es la observación de aves, tienen registradas hasta 267 especies diferentes de aves. Algunas de las aves más comunes son el trogón de coli-pizarra, el tucán de pico iris, el momoto de pico ancho y varias especies de hormigueritos, saltarines, tangaras y mosqueros. Eso si, a parte del avistamiento de aves, se pueden apreciar otros tipos de animales como los monos aulladores, perezosos, osos hormigueros, neques, coatis, etc.
Otras actividades que se practican son senderismo, campismo, giras nocturnas, astronomía desde la torre, talleres de yoga y más.

La Historia del Camino del Oleoducto
Durante la Segunda Guerra Mundial, los soldados estadounidenses construyeron un oleoducto a través de la histórica Zona del Canal de Panamá. Se trataba de un método de precaución para transportar petróleo a través del istmo en caso de que el canal se cerrará a causa de la guerra. El oleoducto atravesaba la densa selva tropical y los soldados construyeron una carretera para dar servicio cuando fuera necesario. La guerra terminó y el oleoducto siguió sin utilizarse. A lo largo de los años, la carretera se utilizó para acceder a determinados lugares de la zona. A medida que la selva seguía madurando y los EE.UU. devolvía la Zona del Canal a Panamá, el tráfico regular en la carretera del oleoducto se redujo. Por esta vía todavía se pueden encontrar reliquias dentro del bosque, como plataformas de ametralladoras anti aérea, un remolque con llantas de oruga que se utilizaba para sacar árboles maderables y las líneas de tubería y la razón por la que se llama Camino del Oleoducto.

Visitantes de Todo el Mundo
Aunque el centro ha sido afectado por la pandemia, hoy en día reciben a Visitantes nacionales que buscan el contacto cercano con la naturaleza. Sin embargo, antes de la llegada del Covid-19, recibían aproximadamente 7,000 Visitantes anualmente provenientes de Estados Unidos, Canadá y Europa.
Igualmente, en este sector se realizan un sin número de investigaciones y recibían la visita de científicos e investigadores provenientes del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud, Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, Fundación Pro-Conservación de los Primates Panameños, La Fundación Yaguará entre otros.