La comunicación es vital para el desarrollo de historias que puedan llevar la esencia de un país y conectar con miles de personas. Sin embargo, la preparación de profesionales es un elemento importante para realizarlo de manera creativa y efectiva.
Una de las ramas de la comunicación más impactantes y de mayor relevancia cultural es el cine, y por las razones explicadas anteriormente el Ministerio de Cultura invitó al cineasta y profesor de la Universidad de Syracuse en el Estado de Nueva York (E.E.U.U) Alex Méndez Giner para impartir un taller intensivo de una semana enfocado en la escritura del guión cinematográfico. Un profesional con más de 15 años de experiencia que ha logrado realizar una gran cantidad de proyectos cinematográficos y que han recorrido con éxito prestigiosos festivales de cine como el Shanghai Film Festival el Milan International Film Festival, Sapporo International Film Festival, Bilbao International Film Festival entre muchos otros.
Aprovechando la estadia del cineasta Alex Méndez Giner The Visitor- El Visitante con el apoyo de la Relacionista Publica Yohanna Rodríguez del departamento de comunicación del Ministerio de Cultura le realizó una entrevista para conocer su opinión en torno a la importancia del séptimo arte en la industria del turismo y el país.
¿Porqué el cine es tan importante para un país?
«El cine es importante porque tiene la capacidad de contar las historias del país. La pantalla puede recoger historias que a lo mejor, pueden perderse. Historias que a lo mejor son orales, que se han pasado de una generación a otra de forma verbal. Utilizando la voz, y pueden encontrar en el cine la posibilidad de perpetuarse en el tiempo. Evidentemente la pantalla del cine logra unas cosas que a lo mejor verbalmente no se logran o el texto escrito no logra, pero es una manera de renovar, de salvar el patrimonio cultural de un país, de elevar una voz, de desarrollar cultura, no hay manera de mover hacia adelante una nación si no hay una educación. Y esa educación se pasa de una persona a otra y ahí hay una memoria cultural. Y el cine tiene esa misión, es vital.»
¿Qué elementos se necesitan para hacer del cine una industria de importancia en Panamá?
«Yo pienso que hay muchísimas oportunidades, que la necesidad de contenidos en el planeta es enorme. La necesidad de contenidos en cada país es enorme. Por un lado el mantener mi patrimonio cultural, el contar las grandes narrativas que nos unen como nación, como continente o gente, esas grandes narrativas forman la unidad de lo que somos. ¿Y que hace falta? El educarse en eso. Una de las cosas más complejas en el arte de la escritura del cine, es poder identificar cómo está estructurado el cuento. Yo lo decía ayer en el taller, de una persona que te cuenta un chiste y te ríes, y una persona q te cuenta un chiste y no te ríes. Los dos te cuentan una historia, y en tal caso entiendes la historia, pero solo uno logra la risa. ¿Qué ocurrió? ¿Cuál fue la manera que estructuró los elementos para alcanzar un objetivo adicional a simplemente, comunicar el significado. Respondiendo exactamente qué hace falta? Cultura. Hace falta entrenamiento y hace falta tiempo. Tiene que haber unas políticas sostenidas en el tiempo, de manera que puedas darle a un cineasta muy joven el tiempo que necesita hasta que esté en la madurez suficiente para que pueda desarrollar un proyecto cinematográfico.»
¿Por qué el cine es clave para posicionar un país?
«Porque el cine contribuye a las grandes narrativas. Lo que une a un grupo de seres humanos, es la creencia de que todos compartimos una gran narrativa de lo que somos… Somos panameños porque ocurrieron estos eventos. Y esos eventos, nos hace una unidad. El cine tiene esa capacidad de utilizar historias con la que todos conectamos, y mantener la coherencia, la unidad dentro de un país. Los seres humanos en el mundo natural, no podían superar un grupo de 100 personas. Lo que hace que logren superar un grupo de 100 personas, es que todos crean una misma historia, hay una coherencia en la historia, hay una gran narrativa de lo que es la patria, del país de donde uno es, o que perteneces a esta civilización o a este grupo humano. Y el cine tiene la posibilidad poderosísima de contar estas historias y hacerlas masivas, universales.»
¿Cómo una película puede utilizarse para apoyar la campaña turística de un país?
«El llamado a la acción para que logre que el turismo puedan venir a un país a través de un contenido cinematográfico. Por un lado el saber, en el conocer que hay. Quizás es una pregunta que necesite dos respuestas. Por un lado está la creación cultural de un país y que se hace atractiva para otras personas. Pero por otro lado está literalmente la creación de un producto comunicacional que tiene la capacidad de hacer el llamado a la acción, que vengan. Sin esa parte y solo dejando al cine – per cé – el cine de ficción, la capacidad de traer gente, tiene que ver con la capacidad de mostrar. Con hacer universal los elementos locales. Ir de lo singular a lo universal.»
¿Qué destinos a nivel internacional han apoyado en el cine para promoverse por medio de historias relevantes para el público?
«Hay ciudades que se han sido utilizadas sumamente en el cine, y que tienen elementos que la hace memorables. Y me pongo a penar por ejemplo: la ciudad de San Francisco. El Golden Gate, aparece en la película de Hitchcok «Vértigo», la locación Ford Point se vuelve un destino turístico, sólo para el que conoce de eso. O las colinas de San Francisco se usan para Bullit donde Steve McQueen corre, rueda por esas calles y quedan en la memoria. Lo mismo ocurrió con la ciudad de Nueva York y ha ido ocurriendo con París. Hay elementos absolutamente icónicos dentro de la ciudad, que se usan y se re-usan hasta que se hacen parte de un legado global. Se trata de cómo los cineastas locales valoran sus propias locaciones. Cómo los cineastas comprenden que el cambio sólo puede venir desde mi propia locación, desde mi propio espacio.»
