La vida de cada persona esta siempre en constante cambio, un día estamos realizando una labor importante pensando que es el camino de vida, y otro día se está realizando una labor innovadora y exquisita como es la producción de flores comestibles.
Este es el caso de Dioselina Bell, mujer, madre, esposa y profesional, quien antes de dedicarse a las flores, impartía clases como profesora de psicología y coordinaba la escuela de esta carrera en la USMA (Universidad Santa María la Antigua). Una persona muy dinámica, sociable y orgullosa de lo qué ha realizado en su vida, y más ahora que se dedica a una labor que ama. Dioselina Bell ha dejado su huella en la Industria gastronómica panameña al punto de ser reconocida como la reina de las hierbas gourmet a nivel nacional e incluso al ofrecer su talento a invitados de gran importancia internacional.

¿Qué la motivó a empezar a producir flores comestibles y hierbas gourmet o aromáticas?
“Bueno, toda la vida a mí me han gustado las flores, es un legado que traigo desde los tiempos que mi abuela me cuidaba. Ella tenía jardines muy bonitos y ella siempre se sabía el nombre de las flores, siendo esa mi experiencia desde temprana edad. Me motivo producir flores a gran escala cuando vine a compartir la empresa con mi esposo, ya que mientras el producía los productos vegetales hidropónicas como distintas variedades de lechugas, hierbabuena, menta, rúgala, cilantro, acelga entre otras. Mientras hacíamos estos productos saludables, hacíamos especialidades y yo me fui involucrando cada vez más en la empresa”.

Describa la variedad de flores comestibles y ¿cuál es la más solicitadas y por qué?
“En cuanto a la variedad de las flores comestibles que produzco están las violas, los pansys, la capuchina, los clavelines, la caléndula, la manzanilla, los cosmos, las rositas, y los claveles que son de un colorido espectacular. Sin embargo, la que más le gusta a la gente son las pansys, o mejor conocidas como pensamientos porque son atractivos y son muy bonitos, dan mucha vistosidad a los platos. Una clase de flor del que se tiene mucho conocimiento y tanto los Chef Pasteleros como los Chefs culinarios las solicitan mucho.”
Sus flores han llegado hasta el Papa Francisco durante su visita a Panamá, ¿Cuál es la diferencia que hay entre un pedido para una personalidad pública al de un cliente diario?
“La selección de los pedidos y especialidades en realidad lo hacen los Chefs, mis pedidos van enmarcados en torno a lo que le soliciten para las creaciones que están realizando. Un ejemplo es la Chef Cuquita que me pide las flores que se acomodan mejor a sus platos, en especial cuando estuvo encargada de la comida del Papa Francisco durante la JMJ de 2018. En la Cumbre de las Américas realizada en Panamá atendimos a muchos chefs que estaban encargados de realizar los platillos gastronómicos para las personalidades internacionales invitadas.”

¿Cómo su talento puede desarrollarse para que se convierta en un icono de nuestra identidad panameña?
“No se si ha sido suerte o virtud de que he producido flores y decoraciones para Chefs de diferentes nacionalidades que han sido nuestro mercado meta y ellos me han dado a conocer. En el 2018 ganamos el premio del buen tenedor precisamente, en base a la calidad y variedad de los productos y a una plataforma donde empezaron a preguntarle a los Chefs, cuáles eran los productores que los atendían y por mis productos obtuve el primer lugar, porque muchos se refirieron a mis flores. Siempre trato de innovar y traer cosas nuevas, eso sí, apegada a la investigación a qué es lo que realmente se puede comer, teniendo en cuenta que hay muchas casas en el mundo que precisamente las producen y yo aprendo mucho de ellas, todo lo que son las flores comestibles o “edible flowers” cómo se les conoce mayormente. Me siento feliz que mis investigaciones y aportes me han colocado como pionera en la gastronomía en Panamá.”
¿Cuál es su visión del turismo gastronómico en Panamá y qué propone para que se desarrolle aún más?
“El turismo gastronómico en Panamá tiene mucho futuro. porque fuera que los platos típicos son muy aceptados por la mayoría de otras nacionalidades, también ya hemos hechos algunas adaptaciones que han mejorado o añadido a la comida típica un toque más gourmet y ha sido pues una exquisitez.
Yo pienso qué si las personas de cada lugar en Panamá deciden agregar un toque de lo que saben hacer, de lo que heredaron de sus antepasados que lo hicieron con amor, y mantener esas costumbres llevan a la gente a interesarse por la historia de cada uno de sus platos. En Panamá todavía nos falta mucha cultura para aprender a valorar y tratar de resaltar el significado que tiene cada plato, cada receta de la abuela o de la vecina que vivieron antes y que hicieron aportes que quedaron como un gran tesoro para las siguientes generaciones.”

¿Qué les aconsejaría a todas las personas que tienen una idea innovadora y no se atreven a realizarla?
“Recomiendo a las personas que tienen una idea innovadora y no se atrevan a realizarla a perder el miedo, a tratar de empezar y hacerlo poco a poco. Siempre entendiendo que al inicio siempre hay ensayos y errores, pero que solo esas experiencias son las que nos van a llevar a alcanzar la meta. Hay que ser persistentes, organizados, no rendirse nunca, ponerle mucho amor a lo que hacen, entregarse a esas tareas. Siempre hay que ser honestos, no corruptos, ni juega vivo, porqué tu tienes esos valores e integridad que te hacen una mejor persona. Todo esto te abrirá las puertas para alcanzar todo por lo que has venido trabajando.”