Nuestro invitado especial, es una leyenda viviente del fútbol y el deporte panameño. Es un verdadero trotamundos al haber jugar en Argentina, Uruguay, Italia, Francia y España. Ya sea como jugador o técnico, Julio Dely Valdés ha dejado una huella imborrable en la memoria colectiva de nuestro país.
Es una persona metódica y preparada en muchos campos, ha viajado tanto y conocido tantas personas alrededor del mundo que tiene para impartir maestría en turismo a donde vaya. Su visión como deportista de alto rendimiento, y hoy en día como técnico de futbol, puede ayudarnos a tener una visión más clara de lo que requerimos mejorar en el turismo.

¿Entre tantos viajes y anécdotas, como fue esa primera sensación de salir de Panamá a jugar cuando sólo tenía 19 años y su primer contacto con hacer turismo?
“La primera vez que salgo de Panamá, fue para viajar a Argentina. Tenía a mi hermano Armando (q.e.p.d) en Argentina, que era mi referencia en ese país. Voy a un país que tiene una cultura diferente a la nuestra, un clima diferente y costumbre distintas. Me encontré con gente amable y cariñosa, me hicieron sentir parte del equipo desde el primer día. Me ayudaron a adaptarme rápido en ese sentido. Me preguntaban curiosidades de Panamá, se imaginaban las playas por ser un país del Caribe, preguntaban mucho por ese lado”.

Cuando cruza hacia Europa, para jugar en el Cagliari, en esos tiempos Panamá no hacía tantas campañas de turismo. ¿La gente tenía alguna idea de Panamá?
“Cuando voy a Italia y Francia, principalmente en Italia se preguntaban, ¿un panameño? ¿Y juega futbol? Estaban perdidos no sabían donde quedaba Panamá, le ponías un mapa y o sabían donde estaba. Hoy es más fácil que conozcan más de los otros países.
De alguna manera, los deportistas, artistas, músicos panameños, somos embajadores y muchos se preguntaban e investigaban de dónde vengo. Me preguntaban ¿Qué hay en tu país? Cuando llego a España, se me acercó la marca Homa para patrocinarme. Al cabo de un tiempo, uno de los representantes de la marca me comentó que visitó Panamá por trabajo, y me dijo que quedó sorprendido gratamente, no sabía que teníamos tantos rascacielos.”

¿Cuáles han sido las experiencias de compañeros de trabajo visitando nuestro país y viviendo el turismo nuestro?
“Cuando estuve como seleccionador de Panamá, me traje gente de España a trabajar como parte del cuerpo técnico. Quedaron encantados con Panamá, y de hecho han empezado a explorarla, incluso más que yo. Han ido a sitios donde yo no he ido como San Blas, y me han hablado maravillas. Uno de ellos me dijo que iría de vacaciones a Penonomé en Panamá y me dijo que iba a surfear. Ya tenía todo planificado, al regresar me contó que había quedado fascinado.”

¿Cuál aspecto del turismo usted siente que necesitamos reforzar más como país?
“Considero que podemos formular las más bonitas estrategias para promover el turismo. Si voy de vacaciones, me gusta ser bien recibido y bien tratado, porque al final los turistas somos clientes. Creo que eso es más importante, a tener buenos hoteles y las mejores playas. El recibimiento en el aeropuerto debe ser excepcional al igual que la estadía. El servicio al cliente para mi es fundamental como turista. Por ejemplo, en Medellín, si vas de compras, el trato es de primer nivel. Cuando voy a mi país, siempre he recibido un buen trato, tal vez por ser una personalidad pública, pero sé que no todos han recibido buen trato”.

¿Cómo sería Julio Dely Valdés participando en una campaña de concientización para promover el turismo interno?
“Hay muchas cosas que cambiaría, como los malos hábitos. El panameño ama mucho a su país y lo defiende a muerte. Pero nosotros tenemos un tema de cultura, porque yo que he estado fuera de mi país, y al regresar he visto a panameños con viejas costumbres como decir que llegará en cinco minutos, pero va a llegar tarde a un lugar y llegan como si nada.
Cuando llegamos a la selección, eso era habitual ver a un jugador llegar tarde. Se le llamaba la atención, y siempre se justificaba que vivía lejos, pero otros que vivían en esa misma área, llegaban a tiempo. Entonces ¿Qué haces? No se le convoca más. En Panamá conducimos muy mal, y nosotros lo sabemos. Pero cuando vives mucho tiempo en el extranjero, regresas y te asustas, y tienes que volver a acostúmbrate. Esa es nuestra cultura.”

¿Qué necesitamos para elevar nuestra cultura?
“Se necesita disciplina. Realicé mi carrera de fútbol prácticamente mas afuera, y como entrenador también. Me he enriquecido de otras culturas. Pero también debe ser que el problema está en Panamá, porque yo soy panameño, pero esos hábitos no me los llevé afuera. Eso tiene que ver más con la educación que recibes en casa. Es un problema que existe mucho en nuestros hogares. Yo tuve la suerte y siempre he agradecido a mis padres por la educación que me dieron.
Desde el primer momento que tengo contacto con los jugadores, yo plasmo mis cinco pautas, y que queden marcadas desde el primer día. Y se le decía que quien no seguía esas pautas, no iban a estar en el equipo. A partir de ahí, cero problemas. ¡Es que tiene que ser así!”

¿Qué consejo le daría a las autoridades del turismo que exprese lo que se debe mejorar para promover nuestra marca país?
“Panamá siempre participa en la expo de Madrid, pero como les he comentado antes, creo que el problema – para mí – está en la educación. Lo he vivido en otros campos, pero si el problema existe ahí en la educación, va a existir en otros campos. Creo en la educación integral”.