Panamá es mundialmente conocida por sus pintorescas islas de ensueño, playas de arena blanca, palmeras que se agitan con el viento y aguas azul turquesa. Si a ese hermoso panorama le agregamos una ruta de acceso abundante en vegetación y belleza natural, entonces este lugar es Boca Chica. Una pequeña aldea pesquera a lo largo de la costa del Pacífico de la Provincia de Chiriquí que es la entrada para el Parque Nacional Marino Golfo de Chiriquí e isla de Boca Brava.
La belleza natural de este lugar es impresionante, sin embargo sigue siendo un lugar desconocido para la mayoría de los turistas. El pueblo es modesto y principalmente habitado por lugareños; sin embargo hay varios alojamientos y restaurantes de buena calidad en sus alrededores. Una joya por descubrir con un encanto oculto.
Un Pueblo Acogedor
Su ubicación es relativamente aislada al estar ubicada en la provincia de Chiriquí, el desvío hacia Boca Chica se encuentra a 39 km al este de la Ciudad de David. Aparte de algunos hoteles y sus restaurantes/bars, los servicios en Boca Chica son sencillos, pero suplen la demanda de Visitantes hasta ahora.
Puerto de Entrada al Parque Marino
Boca Chica cuenta con un puerto desde donde zarpan los botes llevando a los Visitantes hacia las islas y playas ubicadas en el Parque Nacional Marino Golfo de Chiriquí, un parque de 14,470 hectáreas constituido de dos docenas de islas con sus aguas circundantes, las cuales se encuentran repletas de vida marina y silvestre. Es un área que ha venido tomando vigencia como destino de turistas y científicos.
El parque fue creado con el fin de preservar los ecosistemas y proteger su amplia diversidad de flora y fauna, promover el turismo ecológico, la educación ambiental y el aprecio por la naturaleza, así como fomentar la investigación científica.
Actividades para Disfrutar
El Parque Marino Golfo de Chiriquí ofrece innumerables actividades, desde pesca en agua profunda, “snorkelling”, submarinismo, hasta “kayaking” en el mar. Un mar de actividades que ningún Visitante se cansa de disfrutar, gracias a las impresionantes bellezas naturales que ofrece este sector.
Isla de Boca Brava
Boca Brava yace a tan sólo 200 metros a través de la bahía desde Boca Chica, una extensa isla que ofrece varios alojamientos, playas hermosas, y una abundancia de vida salvaje. Sin embargo, cuenta también con algunos vecinos ruidosos, los monos aulladores, que se mantienen viviendo en la exuberante selva de esta isla. Una experiencia que todo Visitante debe escuchar.
Manglar de Boca Chica
Si bien, cada isla en el Golfo de Chiriquí está revestida de un atractivo que invita a quedarse, nadie debería perderse un recorrido por el manglar de Boca Chica, un silencioso paraíso de árboles de raíces zanco que estimula la reflexión y admiración por la naturaleza.
Avistamiento de Ballenas y Delfines
En Boca Chica, de julio a octubre se brinda servicio para el avistamiento de ballenas jorobadas, una experiencia inolvidable, pero si no se puede coincidir durante esos meses, todo el año siempre se puede apreciar avistamiento de delfines.
Boca Chica, un destino que abre las puertas hacia un paraíso lleno de bellezas que pocos lugares en el mundo puede ofrecer.
