Nuestro invitado especial es oriundo de la Villa de Los Santos y considerado uno de los folcloristas más respetados de Panamá. Inició su carrera bailando en el Conjunto Nacional del ex Instituto Nacional de Cultura (actualmente MiCultura), y después amplió su experiencia formando su propio grupo de baile. Se especializó en arte, folclore y producción de televisión. Con el tiempo nuestro multifacético invitado decide fundar y crear la Escuela Nacional de Folclore de Panamá, así como llevar las riendas de la fiesta del Corpus Christi en la Villa de Los Santos, una de las festividades religiosas y culturales más importantes del país.
Arístides Burgos Villareal cuenta con más de 100 reconocimientos de folclore tanto a nivel nacional como internacional, entre estos el premio Dora Pérez de Zárate. La lista de logros en su vida es aun más larga, y en esta ocasión se toma un tiempo para compartir con el equipo de The Visitor- El Visitante sus pensamientos acerca del folclore, las tradiciones y el turismo como motor para elevar nuestra cultura en la sociedad y proyectarla a nivel internacional.
¿Porqué es tan importante para un país preservar su cultura y tradiciones?
“Hay valores como la identidad, el reforzamiento de la nacionalidad, valoración de la historia, el perfil de pertenencia que generan la cultura y tradiciones para un país, además de ello, la cultura representa un elemento de Desarrollo Integral para los pueblos, comunidades, regiones y Naciones del Mundo. De allí que la importancia que reviste la cultura (los rasgos que identifican a cada ser humano y a su entorno, individuos, grupos, colectivos o comunidades) se reflejan como un elemento cuyo uso y aplicación se puede dar en la vida actual y moderna, pues el folclore constituye una serie de “experiencias superadas” y esto es utilizable en el desarrollo integral de las misma.”
¿Cuáles son las tradiciones que comúnmente se promueven más tanto a panameños como a turistas y las que tienen un gran potencial pero que pocos realmente conocen?
“Es importante señalar que todo lo folclórico es parte de lo tradicional, pero no todo lo tradicional es folclore. Por tanto, hablaré de las expresiones del folclore panameño, las cuales mayormente son expuestas a nacionales como extranjeros, los bailes, las danzas, la música, la indumentaria, artesanías, instrumentos musicales y ciertamente la gastronomía popular. Todas ellas como manifestaciones a las cuales se les da una mayor importancia y exposición. De cierto que en la cultura material podemos encontrar la vivienda tradicional y su evolución, técnicas de adquisición, técnicas transformadoras, el transporte; en la cultura social encontramos usos y costumbres, lenguaje, comunicación y en el rubro de la cultura mental espiritual, existen rituales, conocimientos empíricos, cosmovisión, entre otros aspectos que muy poco son abordados para la promoción Turística.”
¿Qué tipo de inversión y proyecto se requiere en el país para asegurar la preservación de nuestras tradiciones y su adecuada promoción en todas sus capas?
“Se requiere una política cultural contundente en base primeramente, a darle cumplimiento al Mandato Constitucional expuesto en el artículo número 87 de nuestra Carta Magna, donde el folclore se debe “estudiar, conservar y divulgar” y como brazo ejecutor del Estado Panameño le corresponde al Ministerio de Cultura a través de su unidad denominada Dirección Nacional de Folclore, sin embargo se precisa de la construcción y el cumplimiento de estas Políticas claras y contundentes. Por otro lado, la Sociedad Civil Organizada en Panamá, vinculada al folclore, mantiene un gran interés, por lo que se requieren también políticas de orientación y de apoyo a estas entidades para mejor gestión del Patrimonio Cultural inserto en las expresiones folclóricas.”
¿En qué segmentos la cultura panameña se diferencia en términos generales de las culturas de otros países en la región Centroamérica y el Caribe?
“La cultura es regional y Panamá pertenece a dicha región geográfica. Existen rasgos mínimos que diferencian una expresión de otra, que solamente los portadores de dichas tradiciones pueden identificar claramente, aunque en el caso de Panamá, la Diversidad Cultural ha logrado una pluriculturalidad que muy pocos otros países poseen y que son producto de nuestra razón de siempre como “país de tránsito.”
¿Qué proyecto nacional usted aconsejaría realizar para que los turistas lo puedan experimentar al estar en nuestro país?
“Como Proyecto Nacional, llevo años promoviendo un Palacio Nacional de la Pollera Panameña. Incrementar Salas de Folclore en los museos a nivel nacional, pero los criterios de los expertos en museos a veces consideran eliminar lo folclórico y reemplazarlo por otros aspectos de la cultura, cuando lo folclórico le daría una línea clara a los visitantes”.
¿Qué tan importante es crear campañas de publicidad donde el elemento más importante es la promoción de las tradiciones y el folclore?
“El folclore debe estar inserto no como un asunto aleatorio o meramente cosmético de adorno. El folclore debe promoverse como parte del Desarrollo Nacional, algunos cargos vinculados al folclore desde la gestión oficial o privada, a veces no están en manos de personal idóneo que tenga la visión esta y se enrumban las campañas y procesos de gestión en aspectos que en vez de fortalecerse, se diluyen. La importancia que reviste el folclore dentro de campañas nacionales e internacionales está en la venta como un elemento de desarrollo del país, pero la visión interna de las autoridades es otra que no va con esa línea. (Veamos el ejemplo del crecimiento económico que genera el Desfile de la Mil Polleras y este evento se vende con esa finalidad de desarrollo económico y manifestó, para un bien cultural como lo es La Pollera Panameña).”
¿Cuáles aspectos de nuestra cultura son los que más impactan positivamente en los turistas ya sea local o internacional?
“La diversidad cultural panameña es lo que más impacta. Ver en una franja geográfica insertos elementos con raíces africanas, elementos indígenas puros y mezclados, una cultura criolla propiamente dicha, y minorías étnicas que generan un “Crisol de Razas”, una amalgama cultural que vale la pena descubrir en Panamá.”
Fotos cortesía: Arístides Burgos Villarreal
